Yo también soy KAI. #01

Personal encargado de la producción de tijeras en la planta de Tahara de KAI. Puede que su currículum y lugar de trabajo sea diferente, pero la pasión por las tijeras de calidad es la misma. Ellas fabrican la “Serie 7000”, la clase superior de tijeras de KAI, utilizada por reconocidos fabricantes para la confección de asientos para coches y también de ropa. Se fabrican 500 a 600 tijeras diariamente. Hoy vinimos a conocer el proceso. La “Serie 7000” de tijeras, a diferencia de las tijeras convencionales, se produce en una línea especial y diferente. Desde los materiales utilizados es distinta. Normalmente el acero inoxidable laminado en forma tubular se corta por moldes, pero en este caso se utiliza una lámina delgada y plana que no se puede enrollar por su espesor de 3mm. El proceso de fabricación comienza con el corte utilizando luz láser. El acero inoxidable cortado en forma de tijera, después de pasar 20 minutos en el horno a 1050ºC, se enfría y se realiza el temple a 180ºC, convirtiendolo en un material fuerte y difícil de astillarse. Luego de este proceso, se transporta a la línea para ser procesada por nuestras tres entrevistadas el día de hoy. Aquí se realiza el pulido de la superficie y la parte posterior, se lima la parte posterior, se afila las cuchillas con una muela y después se prepara la superficie mediante “granallado”, para finalmente estampar el logo con “marcador láser”. Cuando se inserta el mango de resina color negro, se asemeja a una tijera, pero aún falta algo. Para realizar el acabado, primero se afila las cuchillas vertiendo agua, luego después de ajustarlas con un perno, se pulen finamente las puntas. Finalmente, se realiza el último proceso, el más importante de todos que es sacar el filo a las cuchillas. Cada tijera, se prueba a mano cortando tela, verificando que corte equitativamente desde la base hasta la punta. El proceso de ajustar la curvatura de las cuchillas para sacarles el filo, es un trabajo de artesano, en el que la experiencia varios años, marcan la diferencia. Para la fabricación de una tijera, las máquinas cumplen su rol necesario, pero más que ésto, el rol que cumple el ser humano es igual o inclusive mayor.
“No se debe preguntar cuál de los procesos es especialmente importante, pues todos los procesos son importantes. Si no se consigue la precisión en cada uno de los procesos, el ajuste final será engorroso y causará pérdida de tiempo. Si el sentimiento de todos no es uno solo, ¡No se puede realizar este trabajo!”, aclaró la líder de acabado final Sanae Taguchi. Ella nos cuenta que su alegría al ver cortar una tijera, es la motivación para continuar con éste trabajo.
“Que se pueda cortar o no, para nosotros es algo realmente importante. No es solo el filo, sino también el acabado final. Es una satisfacción personal cuando puedo elaborar una tijera realmente hermosa”.